Se acerca un año más el día del padre y quizá en cuál puede ser el mejor modo de celebrar este día tan especial. Por tratarse de un día festivo, comer el día del padre se convierte a veces en una tarea complicada pues los restaurantes se llenan y a no ser que se realice una reserva con tiempo, puedes quedarte sin ningún sitio decente donde comer.

La reserva debe realizarse como mínimo tres o cuatro días antes, pues como este día en Valencia coincide con la fiesta de San José y el fin de las fallas, debemos de añadir que la ciudad puede duplicar durante esos días su número de habitantes y comer el día del padre en un restaurante puede pasar de difícil a imposible conforme se acerca el día.

El día del padre es una festividad que resalta y honra la figura paterna. Es un día festivo para recordarnos la importancia que tienen los padres en la familia y reconocer su labor. En cada país se celebra un día diferente. En muchos países latinoamericanos la celebración de este día se reserva para el mes de junio mientras que en España es el día 19 de Marzo coincidiendo también con países como Bélgica, Andorra y Mozambique, entre otros.

En España, se cree que en torno a 1950 fue cuando se adoptó esta festividad que ya se celebraba en EEUU, de donde se cree que es originaria la idea. Se propuso porque ya existía un día fijo para celebrar el día de la madre y por qué no iba a existir también un día dedicado a los padres.

La elección del día 19 de Marzo, San José, para la celebración del día del padre, tiene como bien puede deducirse, connotaciones religiosas. Además, en Valencia es festivo, pues el día del padre coincide con el final de las fiestas de las “fallas”; el día de San José o “Sant Josep”.

Las fallas o “les falles” están catalogadas como fiesta de interés turístico internacional. Comienzan el último domingo de Febrero con el acto de la “Cridà”, aunque la celebración de las fallas dura 4 días, del 15 al 19 de Marzo. Siendo el día 15 la “Plantà” de las fallas y el 19 “día de Sant Josep” la tradicional “cremà” en la que se prenderá fuego a todos los monumentos falleros formados por “ninots” realizados en cartón piedra, auténticas obras de arte en muchos casos cargadas de protesta social. Con este acto se pone fin a la fiesta fallera cada año.

Existen varias teorías acerca del inicio de esta popular festividad. Una de origen pagano que vincula el origen de las fallas al inicio de la primavera y a la quema de todo aquello que ya no queremos, como símbolo de renacimiento o resurgimiento.

Otra teoría, en este caso religiosa, localiza el origen de la fallas en la quema de virutas y enseres viejos de los carpinteros que limpiaban sus talleres al inicio de la primavera quemando lo que ya no servía y celebrando así la víspera de su patrón “San José”, padre adoptivo de Jesús (que también era carpintero).

A lo largo de estos días festivos de la ciudad de Valencia, uno de los actos más emocionantes y bonitos es el de la ofrenda floral a la virgen de los Desamparados. Los falleros acuden en un acto de peregrinación a la Plaza de la Virgen de los Desamparados, donde cada fallera entrega un ramo de flores a la virgen. Con cada uno de estos ramos se crea un gran manto a una imagen de la virgen que ocupa todo el centro de la plaza. El acto en si es muy emotivo y el resultado es una impresionante virgen con un precioso manto realizado con miles de ramos de flores que llenan la plaza de vistosos colores y perfumes.

Durante los días de fallas también es tradición la tira de cohetes y petardos de forma casi generalizada. La celebración de la mascletà, que es la unión de muchos cohetes siguiendo un impactante e impresionante ritmo, que emociona a los valencianos y por supuesto los tradicionales fuegos artificiales reservados para la noche y que en valencia se llama “el Castell”.

En la ciudad de Valencia el fin de las fallas coincide con la celebración del día del padre y el día de San José, y las familias tienen la tradición de salir a comer todos juntos y celebrar este día unido y así despedir también las fallas, un año más.

Es tradición también salir a comer fuera, a algún restaurante y degustar un buen arroz valenciano.
En el restaurante Casa Ángel, en el Palmar, hemos organizado un menú muy especial para este día formado por platos tradicionales y a un precio muy reducido. Por lo que salir a comer el día del Padre al Palmar y acudir a casa Ángel puede ser una magnífica opción.

Además en el restaurante es posible realizar también un paseo en barca por la albufera, con salida directa desde el restaurante, por lo que comer el día del padre puede convertirse en un día perfecto de celebración para toda la familia.

Además es posible llegar al Palmar en autobús, para aquellos que durante estas fiestas quieran prescindir del coche.

Más información:

http://www.emtvalencia.es/ciudadano/index.php